Latidos del Corazón

Si los latidos del corazón y la mirada pudieran hablar

podrías darte cuenta de lo que siento en realidad

Cada vez que no te puedo mirar

te darías cuenta de lo que me pasa en realidad.

Podrías ver que cuando estoy cerca de ti, solo mis ojos puedo cerrar

no porque te quiera evitar, sino porque no quiero que veas mi alma y su diafanidad .

Si, así soy yo, prefiero lo que siento evitar

Y no sentir que puedo perder mi estabilidad.

Si los latidos del corazón pudieras escuchar
podrías identificar que en él, solo hay sonidos de bondad.
Y aunque a veces parezca que sólo dureza te puedo mostrar
es porque prefiero eso, a que veas mi fragilidad.


Si los latidos del corazón pudieras escuchar
podrías saber que cada palabra que digo es con sinceridad.
Si los latidos del corazón pudieras escuchar
podrías ver más allá, de los que me ven con normalidad.

Si los latidos del corazón pudieras escuchar
podrías darte cuenta que en una ocasión actuaste con brutalidad .
Si los latidos del corazón pudieras escuchar
podrías entender que me dolió entonces tu insensibilidad.


Si los latidos del corazón pudieras escuchar
podrías comprender que actuar así no es actuar con autoridad
Si los latidos del corazón pudieras escuchar
podrías creer que podía acabar en ese instante con tu agresividad.

Si los latidos del corazón pudieras escuchar
podrías entender que a pesar de todo no puedo actuar con crueldad.
Si los latidos del corazón pudieras escuchar
podrías ver que si no lo hice fue por respeto a los demás.


Si los latidos del corazón pudieras escuchar
podrías ver que me decepcionó tu falta de humildad.
Si los latidos del corazón pudieras escuchar
podrías entender que levantar la voz no es actuar con autoridad.


Si los latidos del corazón pudieras escuchar
podrías ver que eso mató toda tu caballerosidad.
Si los latidos del corazón pudieras escuchar
no estaría escribiendo este poema con sinceridad.

Kusiñahui : Escrito uno de esos dias hace meses, cuando queria comprender porque alguien pensó que diciendo las cosas levantando la voz y echando a alguien de un lugar, pensó que estaba mostrando su autoridad, que equivocado estaba entonces, quizá pensó que trataba con objetos que no sienten, y no con personas.